De Corazón a corazón: Hech 6,1-7 ("Nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la Palabra"); 1Pe 2,4-9 ("Él, piedra viva… Vosotros, piedras vivas… para un sacerdocio santo"); Jn 14,1-12 ("Voy a prepararos lugar… Yo soy el camino")

Contemplación, vivencia, misión: ¿Para qué distraerse en tantas cosas superficiales? Lo importante es construir nuestra historia, personal y comunitaria, caminando juntos y compartiendo los bienes que son de la misma familia de hermanos. La relación personal con Cristo y la escucha y anuncio constante de su Palabra, nos construyen como casa ("hogar") de "piedras vivas", fundamentados en Cristo que es "la piedra viva".

*En el día a día con la Madre de Jesús: Ella nos acompaña con su presencia activa y materna. "Antecede con su luz al Pueblo de Dios peregrinante como signo de esperanza y de consuelo hasta que llegue el día del Señor" (LG 68)

*Alegría del Evangelio, renovación misionera: "María es la que sabe transformar una cueva de animales en la casa de Jesús, con unos pobres pañales y una montaña de ternura" (Evangelii Gaudium, n.286)