De Corazón a corazón: 1Sam 1,1-8 (historia de Samuel); Mc 1,14-20 ("El tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; convertíos y creed en la Buena Nueva… Venid conmigo")

Contemplación, vivencia, misión: La llamada a la "conversión" y la llamada al "seguimiento" de Cristo, se relacionan estrechamente. La llamada de Jesús es siempre sorpresa. Abrirse al amor es dejarse "sorprender". Sin este sentido de admiración y disponibilidad, la vocación cristiana (en cualquier estado de vida) se desvanece. La historia de Samuel es también vocacional, de dejarse sorprender por la Palabra de Dios. La vida tiene sentido cuando es "sorpresa", que deja entrever a quien ya está presente y nos lleva en su Corazón desde siempre.

*En el día a día con la Madre de Jesús: Jesús, nacido de María (cfr. Gal 4,4), da sentido a nuestra historia. Sus palabras son siempre recién salidas de su Corazón y piden una "apertura" de seguimiento, de "relación personal" y de "opciones definitivas" (VDo n.77).

*Alegría del Evangelio, renovación misionera: "La Iglesia, como madre siempre atenta, se empeña para que vivan una conversión que les devuelva la alegría de la fe y el deseo de comprometerse con el Evangelio" (Evangelii Gaudium, n.14)