De Corazón a corazón: Zac 8,20-23 ("Vamos a buscar el rostro del Señor"); Lc 9,51-56 ("Los samaritanos no le recibieron…  - Jesús y sus discípulos -  se fueron a otro pueblo")

Contemplación, vivencia, misión: Quien busca de verdad a Dios, se abre espontáneamente a los hermanos. Sin Dios, ni la familia ni la sociedad tendrían futuro. Pero Dios no es una idea o una abstracción: se nos hace presente y cercano por medio de sus dones y especialmente por medio de su Hijo hecho nuestro hermano y viviendo en cada hermano. Es "solidario" sólo quien deja entrar a Dios en su corazón.

*En el día a día con la Madre de Jesús: Por aquellos caminos de Samaría habían pasado también María y José cuando fueron a Belén y cuando iban anualmente a la Pascua. La hospitalidad es un don de Dios que anida en los corazones que se abren a su amor.

AÑO DE LA FE: "La imagen del cuerpo no pretende reducir al creyente a una simple parte de un todo anónimo, a mera pieza de un gran engranaje, sino que subraya más bien la unión vital de Cristo con los creyentes y de todos los creyentes entre sí (cf. Rm 12,4-5)" (Lumen Fidei, n.22).

Para Santa Teresita, ver: Año Litúrgico (Fiestas de Santos)