De Corazón a corazón: Is 62,1-5 ("Se te llamará mi complacencia y a tu tierra desposada… Tu constructor se casará contigo"); 1Co 12,4-11 ("Hay diversidad de dones espirituales, pero el Espíritu es el mismo"); Jn 2,1-11 ("No tienen vino… Todavía no ha llegado mi hora… Haced lo que él os diga"):

Contemplación, vivencia, misión: Hoy podría ser la fiesta de "Cristo Esposo". Se manifestó en Belén, en el Bautismo y ahora en Caná, para compartir la historia de cada uno como parte ("consorte") de su misma historia. María es la figura de una Iglesia "esposa" del Cristo. Dios ya se manifestó así desde el A.T.: ama a su Pueblo como esposa amada. María supo acertar en los deseos de Jesús, intuyendo que lo que su Corazón quería era que ella renovara su "sí": "Haced lo que él os diga". En este sentido ella anticipa el "sí" de la Iglesia esposa, que recibirá el Espíritu Santo, el agua viva, como fruto de la muerte de Jesús en la cruz. El Espíritu Santo comunica a la Iglesia, esposa de Cristo, toda serie de dones para compartir y construir la unidad.

Día a día con la Madre de Jesús: Si está presente María, no faltará el "vino" de la unión y caridad fraterna, de la santidad y de la misión.

AÑO DE LA FE: "María debe renovar la fe profunda con la que dijo "sí" en la Anunciación; debe aceptar que la precedencia la tiene el verdadero Padre de Jesús" (Benedicto XVI, catequesis 19 dic. 2012). Lema del día mundial del emigrante y refugiado: "Un caminar de fe y esperanza".