De Corazón a corazón: Is 1,10-17 (Oblación: "Aprended a hacer el bien… socorred al oprimido"); Mt 10,34-11,1 ("El que no toma su cruz y me sigue, no es digno de mí… Dar de beber aunque sólo sea un vaso de agua fresca")

Contemplación, vivencia, misión: La vida es un tejido hecho de detalles pequeños. El valor verdadero de una persona se expresa en su modo de servir, escuchar, acompañar, callar, comprender, colaborar, darse… Así se comparte la cruz de Cristo. Cada hermano con quien nos cruzamos en la vida, es una vasija de barro creada para conservar y compartir un gran tesoro. La grandeza no está en el barro superficial, sino en el corazón. Mirar a los demás con la mirada de Jesús, equivale a valorarlos según Dios Amor: "El hombre vale más por lo que es que por lo que tiene" (GS 35).

* En el día a día con la Madre de Jesús: Una sonrisa auténtica vale más que todo el cosmos material. El "gozo" que llevó María a la casa de Isabel, vale más que todos nuestros andares y estrategias.

Ver Virgen del Carmen en Año Litúrgico, Fiestas de María.